8 Marzo 2007 - Día de la Mujer Trabajadora
Los movimientos sociales son algo muy interesante. Surgen para solucionar un problema aparentemente puntual, pero luego va y resulta que ese problema no es puntual, sino que obedece a estructuras sociales que habían pasado desapercibidas durante un tiempo infinito.
Y entonces surge la pregunta ¿cómo solucionamos los problemas a los que nos enfrentamos?
Y sólo se puede llegar a una conclusión: cambiando la sociedad.
Pero ¿¿¿quién pensó por un sólo momento que fuese a ser fácil???
La sociedad es muy compleja, y se apoya sobre presupuestos de los que no somos ni remotamente conscientes. Así, según van teniendo éxito los movimientos sociales, según van logrando avances, se van poniendo en evidencia siempre más concepciones que les impiden alcanzar su meta. Es por eso que cada año que se celebra el día de X, cambia el manifiesto, señalando nuevos focos sobre los que actuar en esa larga marcha que es el camino hacia la igualdad.
Ayer el manifiesto que se leyó tras la manifestación se puso de relieve una de las posibles bases de la injusticia que padecen las mujeres: en el mundo de hoy, se considera la independencia y la autosuficiencia como virtudes capitales. Por eso no se reconoce el labora de la labor de cuidado, tradicionalmente relegada a las mujeres. Contra este punto de vista, se reclamaba ayer que la sociedad y los estados reconociesen que ningún ser puede ser independiente o autosuficiente, y que, como mucho, lo que existen son grados en lanecesidad de cuidados que se tienen. Y puesto que el cuidado no es algo que vaya a poder dejar de necesitarse nunca, se planteaba que los varones deben asumir también su responsabilidad en este campo de proveer a los otros con lo que necesitan, permitiendo de ese modo a las mujeres recuperar el tiempo que tradicionalmente dedican a ello e invirtiéndolo en lo que a nosotras nos parezca mejor.
Nunca había ido a esta manifestación y me quedé muy agradablemente sorprendida. Primero por la ingente cantidad de personas que había, era imposible abarcar a todos con la vista (no, no es un efecto del punto de ángulo desde el que tomé las fotografías :P ). También porque había varones ahí, algunos de ellos luciendo mandilones (doy por supuesto que no estaban ahí sólo para quedar bien, sino que de hecho se sienten parte de un movimiento que solicita la igualdad entre todos, con las ventajas que eso les aporta también a ellos). Y por fin me sorprendió la banderas que se ondearon: de sindicatos, de la república y muchas, pero muchas, del arco iris. Banderas de arco iris portadas por mujeres y portadas por hombres.
Habría mucho que hablar al respecto, pero otro día, un besito a todxs
Y entonces surge la pregunta ¿cómo solucionamos los problemas a los que nos enfrentamos?
Y sólo se puede llegar a una conclusión: cambiando la sociedad.
Pero ¿¿¿quién pensó por un sólo momento que fuese a ser fácil???
La sociedad es muy compleja, y se apoya sobre presupuestos de los que no somos ni remotamente conscientes. Así, según van teniendo éxito los movimientos sociales, según van logrando avances, se van poniendo en evidencia siempre más concepciones que les impiden alcanzar su meta. Es por eso que cada año que se celebra el día de X, cambia el manifiesto, señalando nuevos focos sobre los que actuar en esa larga marcha que es el camino hacia la igualdad.
Ayer el manifiesto que se leyó tras la manifestación se puso de relieve una de las posibles bases de la injusticia que padecen las mujeres: en el mundo de hoy, se considera la independencia y la autosuficiencia como virtudes capitales. Por eso no se reconoce el labora de la labor de cuidado, tradicionalmente relegada a las mujeres. Contra este punto de vista, se reclamaba ayer que la sociedad y los estados reconociesen que ningún ser puede ser independiente o autosuficiente, y que, como mucho, lo que existen son grados en lanecesidad de cuidados que se tienen. Y puesto que el cuidado no es algo que vaya a poder dejar de necesitarse nunca, se planteaba que los varones deben asumir también su responsabilidad en este campo de proveer a los otros con lo que necesitan, permitiendo de ese modo a las mujeres recuperar el tiempo que tradicionalmente dedican a ello e invirtiéndolo en lo que a nosotras nos parezca mejor.
Nunca había ido a esta manifestación y me quedé muy agradablemente sorprendida. Primero por la ingente cantidad de personas que había, era imposible abarcar a todos con la vista (no, no es un efecto del punto de ángulo desde el que tomé las fotografías :P ). También porque había varones ahí, algunos de ellos luciendo mandilones (doy por supuesto que no estaban ahí sólo para quedar bien, sino que de hecho se sienten parte de un movimiento que solicita la igualdad entre todos, con las ventajas que eso les aporta también a ellos). Y por fin me sorprendió la banderas que se ondearon: de sindicatos, de la república y muchas, pero muchas, del arco iris. Banderas de arco iris portadas por mujeres y portadas por hombres.
Habría mucho que hablar al respecto, pero otro día, un besito a todxs
posted by Laura at 1:30 p. m.
5 Comments:
si, los hombres también son seres humanos y portan banderas cuando es necesario
La mayoría de los (y digo los y mayoría) asistentes a esa marcha es probable que fuesen por dos motivos:
1- Pareja de alguna feminista.
2- Amigo de alguna feminista en cuyos paños se quería introducir.
La mujer está discriminada en muchísimos aspectos, pero no seremos los hombres los que luchemos contra la discriminación. Podemos concienciarnos e ir más allá cada vez, pero la herencia cultural es muy fuerte y por desgracia lo seguirá siendo durante mucho tiempo.
Bueno, he aquí dos posturas interesantes, kineas es el "típico" hombre en el que pienso cuando relfexiono sobre todo lo que aún está por cambiar (no te lo tomes a mal kineas, saber que te adoro, pero a veces tienes unas cosas...)
y anónimo parece molestarse por cómo parece que he hablado de los hombres, pero te diré algo: el objetivo de pedir que las cosas cambien en el reparto de los cuidados no es que los hombres porten pancartas o hagan bulto en las manifestaciones, sino que asuman sus responsabilidades con respecto a lo que algunxs autorxs llaman "la esfera de lo doméstico" . Que soliciten las bajas por paternidad (que a día de hoy solicitan sólo una minoría de varones) y que asuman que el cuidado de la especie humana debe repartirse al 50% entre hombres y mujeres, que no se trata de "ayudarnos", sino de asumir que nosotras no somos responsables del cuidado de los otros.
De hecho, eso no es algo que sólo los hombres deban asumir, también las mujeres tenemos que concienciarnos al respecto. Pero claro, es difícil...
Sabes de sobra que no hablaba de mí en mi reflexión si no que generalizaba...
Parece mentira.
:P
Lo que sé es que tú no estabas ahí, no sé si conocías a alguno de los que sí estaban...
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