¿Libres?
¿Somos libres? ¿Podemos cambiar el mundo?
Estas preguntas retornaron a mi mente durante una discusión entre los compañeros de trabajo, pero no son nuevas. Existe la posición ¿pesimista? que consiste en considerar a la gente de a pie meros instrumentos de algo más grande que los arrastra, privándoles de su capacidad de influir en la construcción de un mundo mejor.
Los ¿optimistas? que creemos que la libertad existe, y que por tanto las personas son responsables de sus acciones vivimos en un mundo más crudo: si no se intenta cambiar el mundo es precisamente porque las personas no quieren cambiarlo. Aprenden a conformarse con sus parcelas de poder y no se arriesgan para procurar el cambio, por miedo a acabar peor. ¿Puede acabar peor un "obrerete" del primer mundo? ¿Tiene mucho que perder si lucha por el mejor-estar de otras personas que en principio le son desconocidas?
Es muy complicado, para empezar porque no dejamos de vivir inmersos en nuestros mundos incluso cuando en el tiempo libre nos podamos dedicar a reflexionar sobre cómo cambiar el mundo.
Es curioso, cuando pienso en estas cosas siempre me acuerdo de "1984", donde todos los problemas tienen como causa el que unos pocos hombres no estén dispustos a ser iguales que los demás, ellos deseaban ser más poderosos. Y es cierto que en todas las sociedades existen jerarquías de poder, incluso en las llamadas "igualitarias" el poder se estructura por edades y género...
Supongo que tendré que aplicarme el cuento del "I'm starting with the man in the mirror", lástima que sea una woman...
pd. Sigo sin internet, pero algún vecino mío parece estar ejerciendo de buen samaritano!
Estas preguntas retornaron a mi mente durante una discusión entre los compañeros de trabajo, pero no son nuevas. Existe la posición ¿pesimista? que consiste en considerar a la gente de a pie meros instrumentos de algo más grande que los arrastra, privándoles de su capacidad de influir en la construcción de un mundo mejor.
Los ¿optimistas? que creemos que la libertad existe, y que por tanto las personas son responsables de sus acciones vivimos en un mundo más crudo: si no se intenta cambiar el mundo es precisamente porque las personas no quieren cambiarlo. Aprenden a conformarse con sus parcelas de poder y no se arriesgan para procurar el cambio, por miedo a acabar peor. ¿Puede acabar peor un "obrerete" del primer mundo? ¿Tiene mucho que perder si lucha por el mejor-estar de otras personas que en principio le son desconocidas?
Es muy complicado, para empezar porque no dejamos de vivir inmersos en nuestros mundos incluso cuando en el tiempo libre nos podamos dedicar a reflexionar sobre cómo cambiar el mundo.
Es curioso, cuando pienso en estas cosas siempre me acuerdo de "1984", donde todos los problemas tienen como causa el que unos pocos hombres no estén dispustos a ser iguales que los demás, ellos deseaban ser más poderosos. Y es cierto que en todas las sociedades existen jerarquías de poder, incluso en las llamadas "igualitarias" el poder se estructura por edades y género...
Supongo que tendré que aplicarme el cuento del "I'm starting with the man in the mirror", lástima que sea una woman...
pd. Sigo sin internet, pero algún vecino mío parece estar ejerciendo de buen samaritano!