Vivir a través de otros
Estaba yo preguntándome ¿cómo vivimos nuestras vidas? ¿Nos juntamos con aquellas personas que se atreven a hacer lo que nosotros no somos capaces? ¿Por qué?
Cuando animamos a una persona a hacer algo diciendo 'si yo fuese tú lo haría así', ¿cómo podemos afirmarlo? No somos esa persona, no la conocemos en toda su intimidad, no conocemos los resortes que le hacen saltar, las cosas que le emocionan, sus aspiraciones inconfesadas.
Y sin embargo la mayoría de las personas son capaces de decir 'yo lo haría así'.
Pero esas personas que sueltan con tanta facilidad el 'yo haría esto o aquello', ¿son capaces de atenerse a sus propios consejos?
Pero bueno, en realidad cuando empecé a escribir esto, no pensaba en lo de la gente que te aconseja, sino en las mujeres que viven a través de otros: a través de sus hombres, a través de sus hijos. No son todas, ni en todos los tiempos, ni en todos los aspectos de su vida. Pero las hay. Y creo que hay hombres que tampoco pueden hacer lo que querrían, solo que ellos ni siquiera tienen la oportunidad de vivirlo a través de otro porque ellos son elegidos protagonistas en nuestra sociedad y, o lo viven ellos, o no lo viven en absoluto. ¿Por qué? ¿Por qué hay cosas que no nos atrevemos a hacer, incluso cuando racionalmente no nos parecen terribles? Basta con que nos parezca que no tendrían buena acogida para que nosotros mismos nos refrenemos en lugar de confirmar nuestras sospechas empíricamente.
Bueno, afortunadamente, para cada vez más gente, la vida es larga. Y eso implica que nos trae nuevas oportunidades. Segundas oportunidades, terceras oportunidaes, cuartas... Tantas como estés dispuestx a buscar. Pero hace falta valor, no rendirse, arriegar la vida. Por otro lado... ¿qué clase de vida es aquella que simplemente dejas discurrir de acuerdo a las convenciones, sin intentar nunca tomar las riendas y cambiar el rumbo?
A veces, lo que parece que va a ser un rodeo, o un camino imposible, acaba mostrándose como la única opción que podía llevarte a tu destino. Y es que por muy transitadas, amplias y lisas... es decir, transitables, que sean los caminos comunes, no valen para todo el mundo. Lo 'normal' no existe, es como el término la 'nada', una palabra que nombra aquello que no existe.
Lamentablemente a veces nos olvidamos de que el lenguaje es pura convención, una manera de entendernos siempre y cuando no pretendamos llegar al fondo del asunto. Sabemos lo que las cosas son sólo hasta que alguien nos pide que se las expliquemos.
Incluso ese imperativo de vivir tu vida es un puro producto social. ¿qué es 'tu vida'? Es algo que sólo existe si tomas como unidad de la existencia al individuo, si supones que somos independientes los unos de los otros. Que existen unos y otros.
A veces la única manera de encontrar el camino es luchar contra esas sombras, contra esos espejismos del lenguaje y tratar de alcanzar lo que hay más allá, lo que está más adentro.